Crítica realizada por Sandrayruth
Un aristócrata escocés de las Tierras Altas y una plebeya en el siglo XXI.
Dylan MacDougall y su sobrino James
mantienen una difícil relación a causa de infructuosos hechos acaecidos
en su pasado y que tuvieron como última consecuencia que James fuera
expulsado del colegio donde estudiaba. Para conseguir su readmisión,
Dylan contrata a una profesora particular. Se trata de una chica
española de carácter chispeante y dinámico, y muy sexy también, que
terminará robándoles el corazón a los dos MacDougall.
Para Ana, será
un choque cultural convivir en un entorno fascinante con dos
aristócratas, y le resultará imposible no crear también lazos afectivos
con ellos, sobre todo con Dylan. Pero no le importa su dinero, ni su
posición y, además, no confía en que un aristócrata pueda interesarse de
forma sincera por una plebeya...
La verdad es que no conocía a esta
autora hasta ahora, y cuando descubrí este libro, me encantó su portada y
la sinopsis de la misma, que además, me parece bastante acertada para
lo que sucede en el libro, que me ha encantado.
Lo primero que me llamó la atención,
aparte de lo que he nombrado antes, fue el título. Y es que a mí, todo
lo que tenga que ver con Escocia, me fascina, y este libro no ha sido
menos.
Me ha gustado mucho como está
desarrollada la trama. Cómo poco a poco Ana se va ganando a esa gente
que parece tan estirada en un principio, y que además tienen bastantes
problemas en su entorno, con la más problemática, el odio que le profesa
James a su tío Dylan.
Ana es una chica joven que decide
aceptar el trabajo de profesora, sin saber que gracias a eso, conocerá
lugares importantes en Escocia, lugares que han tenido y que tienen un
gran papel en su historia, y es que Ana, aparte de ser una viajera,
quiere escribir un libro inspirado en esas tierras tan bonitas.
Cuando conoce a James y a Dylan, se
queda prendada de los dos, pues se nota a distancia que sufren. Por
razones equivocadas, como descubre mucho después, y ella está decidida a
que sobrino y tío se perdonen, pues tienen más en común de lo que
quieren reconocer, por lo menos James.
Me han gustado mucho los protagonistas
principales. Creo que se complementan a la perfección, aunque Ana sea
reacia a esa relación desde un principio, pues ella es una chica
acostumbrada a valerse por si misma, y todo lo relacionado con la
aristocracia la sobrepone mucho, y no quiere ser considerada la amante
de nadie, y mucho menos ser mantenida.
Y Dylan... ¡Qué hombre! Me ha encantado
desde el principio con esa forma de ser, tan estirado, pero tan sencillo
a la vez. Un hombre que guarda las distancias cuando tiene que hacerlo,
pero que en el fondo busca a una mujer que le complemente, y eso es lo
que encuentra en Ana.
Me hubiera gustado que la historia de
Brenda y James, hubiera llegado a buen puerto, no se si la autora tendrá
pensado escribir ese libro, pero desde aquí le hago la petición de que
por favor lo haga. ¡¡No puede dejar a los dos jóvenes así!! Y es que los
secundarios son maravillosos.
Lo que más me ha gustado son las
descripciones, pues por unos momentos me he visto transportada a
Escocia, una tierra que yo siempre he querido conocer. Me ha gustado
mucho saber parte de la historia que no conocía, e incluso conocer las
descendencias de los clanes y sus colores y significados.
Un libro que recomiendo a quien quiera
leer una gran historia de amor en tiempos contemporáneos, pero con dejes
históricos gracias a las descripciones de la autora y su ambientación. Y
además, me ha encantado conocer el significado del título, que le va de
perlas!!
Mi puntuación es de Muy Bueno...
Hola chocolates, hoy os traigo la reseña de Mo Duinne de Mercedes Gallego.
Me hace mucha ilusión presentaros a esta escritora que es extremeña.
Cuando descubrí que había una extremeña que había publicado con el sello
de Harlequín y encima su obra estaba ambientada en Escocia y tenía un
highlander del siglo XXI, no pude aguantar más y me lancé a por ella.
demás con esa portada tan bonita, no me cupo la menor duda. Tenía que
leerla sí o sí. Solo os digo que cuando leáis cierto fragmento de la
novela estaréis viendo la portada en vuestros pensamientos. Ya me lo
diréis…
Y ya os cuento un poquito la historia porque sino me enrollo y en vez de sinopsis es otra novela.
Dylan es un aristócrata escocés, con todos los atributos físicos que
tienen esas novelas de Highlanders que tanto nos gustan. Es reservado,
observador y su máxima prioridad es su familia, sean de su sangre o no.
Sería un perfecto Jefe de su Clan en otra época más lejana
Dylan vive con un sobrino adolescente, James, del que se ha hecho cargo
desde que los padres de éste murieran por distintas causas. James, como
buen adolescente que se precie, es un rebelde sin causa, cree que todos
los problemas o sufrimientos que tiene en su vida son culpa de su tío y
por eso la relación entre ellos es tensa y fría, hasta que aparece Ana…
Ana es una morenaza española de ojos oscuros que desborda alegría y
espontaneidad por todos los poros de su piel. Le encanta viajar y por
fin se ha decidido a ir a Escocia, una zona que le encanta y de donde se
la que se quiere empapar para poder escribir su novela. Un buen día ve
un anuncio en un periódico en el que se precisaba una maestra y allí se
presentó, aunque no fuera el mejor día de su vida…
El trabajo para el que se presentó Ana era para preparar las asignaturas
que le habían quedado pendiente a James. Cuando ella llegó a Greenrock
se encontró a un adolescente rebelde, desanimado y con un gran odio en
su interior, pero con su dulzura y con cariño intentaría metérselo en el
bote.
Dylan en cuanto la vio entrar se quedó prendado de ella, no físicamente,
que también, sino porque era divertida, resuelta, y con una gran
personalidad. Sin embargo ella era una persona libre, que no se regía
por protocolos o normas, que prefería unos vaqueros a un Carolina Herrera,
unas sandalias a unos tacones y que veía en él a un aristócrata recto,
sujeto a las normas que conllevaban el peso de su ducado. !Vamos, dos
polos opuestos!
Tengo que destacar que la novela no solo ha sido una historia romántica
sino un maravilloso viaje por las tierras escocesas. La autora describe
todos los lugares más relevantes de esa zona de tal forma que nos hace
viajar junto con los protagonistas con tan solo sus palabras. Solo le
pondría un “pero” y es que he echado en falta un epílogo; me gusta leer
cómo les va a los protagonistas en un futuro cercano.
Así que, si queréis comprobar y demostrar que es cierto el dicho de que
los polos opuestos siempre se atraen, tendréis que leer la novela para
averiguarlo y os garantizo que no os arrepentiréis.