"Si pudiera dormir rodeándote con mis brazos, la tinta podría quedarse en el tintero" (D. H. Lawrence)

jueves, 26 de abril de 2018

Pepa Bueno, premio Santiago Castelo



¿De dónde ha salido ese premio concedido a Pepa Bueno? os preguntaréis la mayoría.  Resumo: El Ayuntamiento de Don Benito (Badajoz) decidió galardonar la trayectoria profesional de periodistas de cualquier medio en honor al poeta, académico y periodista extremeño Santiago Castelo, quien, a pesar de no haber nacido en nuestra ciudad, mantuvo excelente lazos con ella.
Para los que no tuvimos oportunidad de conocerlo, un breve curriculum: llegó a ser subdirector del diario ABC, donde comenzó a trabajar a los veintiún años; obtuvo numerosos premios culturales, entre otros de poesía; dirigió la Real Academia de Extremadura y en 2006 recibió la Medalla de dicha Comunidad.
Las premisas para otorgar el Santiago Castelo son: Trayectoria profesional, Calidad personal, Compromiso con el Periodismo y Defensa de las Libertades.
La trayectoria de Pepa Bueno es reconocida por los españoles tanto en radio como en televisión. Si bien su rostro se popularizó con el programa Gente o la dirección del telediario, es su voz la que la ha metido de lleno en nuestros hogares cada mañana.
El compromiso personal y la defensa de libertades es una constante que la caracteriza. Destaca por su feminismo y su defensa a ultranza de los derechos democráticos. Quienes la escuchamos de lunes a viernes en la cadena Ser damos fe de ello. No se casa con nadie. Su objetividad profesional resulta intachable pero es su calidad como persona, a mi entender, la guinda del premio; tanto del Castelo, de la Medalla de Extremadura que recibió en 2009, como del resto de galardones que le han otorgado.
María José Bueno Márquez es una mujer sencilla, honesta, con un modo de exponer apasionado y sensato que deja a sus interlocutores con la boca abierta. Me encantó su falta de «divismo», sus pies en la tierra. Además, me enorgullece que sea extremeña y presuma de ello.
Durante la gala se enfrentó a las preguntas de cuatro compañeros de profesión en una interesante tertulia sobre el papel de la mujer en el mundo actual, el futuro del periodismo o las innovaciones tecnológicas, entre otras cuestiones, dejándonos claro que no toda las noticias que nos llegan son información y que resulta imprescindible una base que documente esa información. Dicha labor únicamente puede realizarla un periodista.
El resto nos quedamos en cazadores de imágenes.
La gala tuvo, por supuesto, su parte política, con las aportaciones del Presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, y la del Alcalde de Don Benito, José Luis Quintana Álvarez; la cultural, con un excelente discurso del director de la RAEX, Francisco Javier Pizarro Gómez, y tras la tertulia y la entrega del premio, la musical, con el violinista flamenco Paco Montalvo, de quien basta decir que es el violinista más joven del siglo XXI en debutar en el mítico teatro neoyorquino Carnegie Hall.
No estuvo mal, como broche de una gala que llenó a mi ciudad de orgullo y aplausos.
Yo, particularmente, como dombenitense y como participante del comité organizador, así lo viví y he querido compartirlo con vosotros.




Para finalizar, un recuerdo especial a otra entrañable mujer, aunque ésta se esconde entre bambalinas, la directora de Cadena Ser Extremadura, Blanca Juste Pérez. Resultó un placer departir con ella.





jueves, 19 de abril de 2018

La magia de los libros


Primero fueron los cuentos: La ratita presumida, Hansel y Gretel, Piel de asno, Riquete el del copete...y tantos más.
Después los tebeos: TBO, Jerónimo, El capitán Trueno, El jabato, El zorro…
Más o menos por entonces, también los ilustrados de Bruguera: Corazón, Tarzán,  Viaje al centro de la tierra, Cinco semanas en globo, Historia de dos ciudades…
Ya adolescente total: Corín Tellado, Agatha Mor, Marcial Lafuente Estefanía…y las originalidades de Erich Von Däniken o Jiménez del Oso...
Siguieron los obligatorios libros de lectura del instituto, aburribles unos, como Milagros de nuestra señora y  sorprendentes otros, como La familia de Pascual Duarte.
Para colmo, a través de un amigo bibliotecario descubrí el apasionante universo de El señor de los anillos y rarezas como La metamorfosis o El castillo de Kafka, en esa época en la que lo leías todo, de comienzo a fin. Autores americanos, europeos, españoles del exilio y de la resistencia pasiva criados en una España inhóspita.
Todo lo que había que leer, se leyó. Poesía, teatro y prosa.
Miles de esas historias se quedaron conmigo; otras, se olvidaron. Pero todas hicieron de mí una lectora apasionada. Y, supongo, contribuirían a crear a la escritora.
Me decanto, lo sabéis quienes me seguís, por la novela negra, por las historias intimistas, las mágicas de Allende o García Márquez, las de guerra y posguerra, de Almudena Grandes o Manuel Rivas… Y por supuesto, la romántica, la buena, la de Diana Gabaldón  y la de cientos de autoras, españolas y extranjeras...la de mundos oscuros, vampiros, lobos, cambiantes...o simplemente las de amor amor.
Así pues, si mi vida siempre estuvo plagada de libros ¿ cómo no voy a celebrar el lunes 23 que existan los libros, las bibliotecas, las librerías ?
El olor maravilloso de unas páginas recién abiertas, de las portadas exquisitas que  seducen la vista, de  palabras creadoras de vidas que podrían ser la tuya, ¡qué querrías fueran la tuya! ¡Esos mundos de ayer y hoy!  
Un libro. Siempre. Desde siempre.

jueves, 12 de abril de 2018

Solos


Estamos solos.
Aunque tengamos pareja,
amigos,
familia.

Estamos solos.

No cuando viajamos en metro
o caminamos por la calle.
Estamos solos
al tomar decisiones trascendentes,
al enfrentarnos a nuestros miedos,
al pensar en el futuro.

No importa estar rodeados todo el día
por una ingente cantidad de personas;
ni siquiera que estas  te aprecien.

A la hora de la verdad,
en la vida,
estamos solos.

Nuestra conciencia y nosotros.
Nuestro valor y nosotros.

Nuestra soledad y nosotros.

jueves, 5 de abril de 2018

¿Vidas privadas?


Me cuestiono qué nos induce a la gente a empeñarnos en contar al mundo nuestras alegrías y miserias. ¡Parece como si no existiéramos fuera de las redes sociales!
Para los que me lo vayan a echar en cara tengo respuesta rápida: las uso como herramienta de promoción para mi trabajo. No sólo hablo de mis novelas, también de las que leo o de las actividades culturales a las que asisto, para ofrecer una visión cercana de mí. No es lo mismo ver una portada y no saber a quien pertenece que unir esa visión a la del autor/a. Hay personas a las que leo porque las conozco, o porque sé que tenemos valores o gustos comunes. Si el libro de un autor desconocido me entusiasma enseguida busco información sobre él / ella; si no me gusta; no.Pensando en ello, me publicito. 
En fin, he divagado. La reflexión iba de otra cosa. Desde mi punto de vista lo interesante de las personas son sus ideas, no sus vidas privadas; sin embargo hay una tendencia a exhibir datos sobre la familia, los problemas, las alegrías...Que lo respeto, pero no lo entiendo.
Creo que tener privacidad es hermoso. Es mágico. Te da un respiro en un mundo donde todos parecen saber de todos. Antes nos quejábamos de los vecinos cotillas pero es que ahora los invasores cotillas somos nosotros que damos información de nuestras vidas  sin el menor pudor.
¿Qué me ha llevado a escribir esta reflexión? Una peli de Alex de la iglesia que vi la otra noche, Perfectos desconocidos. ¡Jod…! Estos no van de cotillas, al revés, van de secretos. ¡Y menudos secretos! Pero claro, te pillan el móvil y tienes tu vida expuesta. Todo lo que has callado, por interés o miedo, puede ser motivo de escándalo en medio segundo. Las redes guardan nuestras fotos, nuestros mensajes, nuestras agendas… Los pensamientos que antes escondíamos en diarios los tenemos ahora en carpetas o aplicaciones de móvil, las cartas son wassaps ...y así hasta el infinito.
En el futuro viviremos como en un escaparate, tipo Gran Hermano ( si es que no lo estamos haciendo ya)
En un descuido, hasta puede que la novela de George Orwell, 1984, sea una realidad.