El lema era Y a ti, ¿te importa? Como mujer, maestra, feminista y escritora, mi respuesta era un rotundo SI. Y me apunté al III Congreso para la erradicación de la violencia de género ( vicaria, institucional, sexual y digital), organizado en mi localidad, Don Benito ( Badajoz, Extremadura, España), por la Oficina de Igualdad y Violencia de género, bajo el auspicio del Ayuntamiento y otras Entidades.
Si ya de por sí es una gozada reunir a mujeres para intercambiar información, hacerlo sobre los temas que se trataron fue espectacular. No solo se transmitieron datos de interés para lo/as trabajadore/as del sector, sino para cualquier persona interesada en la igualdad entre hombres y mujeres y para buscar remedio a la terrible lacra que es la violencia sobre las mujeres y sus hijos.
Moderó con ecuánime profesionalidad Dª M. Angeles Mejías García-Hierro, formadora en estas lides, y participaron las siguientes ponentes:
Dª Rosa Casas, antropóloga y fundadora de la asociación Dhides, quién, con su discurso transgresor, removió las conciencias de los presentes. Reconoció que es difícil sacudirnos el yugo de la educación machista porque la tenemos tan interiorizada que, a veces, ni nos damos cuenta. Particularmente me hizo pensar y admito que caigo a menudo en posturas que no son sanas para con mis congéneres. Su mensaje me resultó impactante, pero creo que estamos aún lejos de desprendernos de estúpidos estereotipos que nos inculcaron en la escuela y la iglesia. Como mujer de 63 años, soy hija de una época, y entiendo que no todas las mujeres, por muy progresistas que nos sintamos, seremos capaces de romper moldes.
Dª Andea Cabezas Mateos, jurista y presidenta de la asociación Stop Violencia Vicaria, demostró un dominio del lenguaje legal y un aplomo en su información, que nos llenó de esperanza para aprender a lidiar con abogados, jueces y personas determinantes del futuro de esas mujeres y madres que se atreven a denunciar. Sólo si creemos en el respaldo de la justicia, las agredidas se atreverán a afrontar el riesgo; pero es muy cierto que se da demasiada publicidad a sentencias machistas, seguramente porque a cierta parte de la sociedad le interesa más que la mujer tenga miedo a denunciar, que cierre la boca y viva acobardada por esas amenazas ( que no son reales con la ley en la mano). Si estás en esa situación y tienes dudas, acude a dicha Asociación.
Es maravilloso conocer a tantas y tantas mujeres, en cualquier rincón del país, luchando por el bienestar de esas otras mujeres en situación vulnerable. La sororidad es evidente en congresos como este. Y me consta que ha habido muchos esta semana por toda la geografía, así que debemos confiar en la hermandad femenina.
Conste que no siento interés en atacar al género masculino; por suerte hay muchos hombres que respetan a las mujeres y educan a sus hijos en igualdad. El problema está en los que nos siguen viendo cosificadas, entes destinados a la cama y la cocina, sin inteligencia para ejecutar roles de poder. Además, por desgracia, se está politizando y usando la figura de la mujer para interés de los hombres, no para la igualdad. Hay mucho dinero invertido en redes sociales para que las mujeres sean denigradas y cosificadas, tanto por adultos como por jóvenes.
Dª Beatriz Nuñez Jaldón, psicóloga especializada en menores victimas de violencia, nos ofreció la esperanza de que esos jóvenes puedan recuperarse y lo que es más importante, evitar que repitan esa violencia con la que crecieron. Debe ser una realidad durísima para un hijo preguntarse por qué su padre no lo quiere, por qué emplea la violencia como desahogo, precisamente con los que más debería querer y proteger. Interiorizar esa forma de relación para mí es inconcebible porque soy afortunada de haber vivido en una familia que me cuidó y protegió; soy incapaz de ponerme en la mente de esos niños sin ponerme a llorar.
El primer día terminamos con el visionado de un cortometraje de María Bestar, No estás loca, que os invito a buscar en redes. ¡Como la vida misma!
La segunda jornada nos previno de la IA, de la mano de Dª Gracia Nogales López, ingeniera informática y magnífica comunicadora. Advirtió de cómo la IA recoge datos para que luego los usemos, pero lo hace atendiendo a una serie de algoritmos en los que predomina el hombre blanco y sus circunstancias; hay ocasiones en que no reconocen realidades del mundo femenino porque se han usado unos traductores con sesgo de género. Dicho en plata, si quieres generar dos imágenes siguiendo las palabras cantar, flores, valiente, CEO, las primeras dibujan a una niña y la segunda a un niño. ¡Estereotipo total! Si usáis la IA, podéis quejaros al sistema por ser machista, no os cortéis. La IA también necesita que la eduquen en Igualdad.
Dª Victoria Romero Asarta, psicóloga y pedagoga, sexóloga y agente de igualdad, nos habló del peligro de la pornografía como única fuente de educación sexual y en la necesidad de implicarse en esa educación tanto a padres como a maestros y profesores. Estoy viendo la serie Pubertad, de Leticia Dolera, y coincide, punto por punto, con su información. Que la edad media del consumo de pornografía esté en los diez años, debe darnos en qué pensar.
Dª Yolanda Domínguez, artista visual, consultora y comunicadora, nos llegó al corazón, representando al daño físico y mental que puede recibir una mujer por ser valiente y enfrentarse a las mentiras y los mentirosos de las redes sociales. Ni siquiera tras haber ganado a un fantasma insultador, machista y, por supuesto, blanco, en los tribunales, siente la satisfacción de la victoria. Las secuela de esa lucha es el agotamiento. Desde aquí mi más rendido apoyo. Por suerte, las mujeres con coraje en las venas se hunden un tiempo, pero saben salir a la superficie porque conocen las herramientas.
Finalizamos con la monologuista, Dª Patricia Sornosa, feminista, actriz, directora de teatro y dramaturga. Os invito a seguirla en redes. Sus monólogos conllevan tantas verdades y denuncias que, a través de la risa, nos pone en situación y nos invita a reflexionar y actuar.
Espero no haber olvidado nada importante, y si escribo en el blog fuera de mi criterio de hacerlo quincenal, es por lo que me ha impactado toda esa información y el deseo de hacerla llegar a mis lectores.
La responsabilidad de erradicar la violencia de género, no está solo en los agentes preparados para tal fin, está en todo/a ciudadano/a que sienta empatía por sus semejantes.
Gracias por leerme.



