"Si pudiera dormir rodeándote con mis brazos, la tinta podría quedarse en el tintero" (D. H. Lawrence)

jueves, 28 de febrero de 2019

Villandry y Carballo.

https://es.france.fr/es/valle-del-loira/articulo/el-castillo-y-los-jardines-villandry

Si visitáis esa página encontraréis uno de los más fascinantes castillos del Loira, en Francia. 
Para botón, una muestra: 


¿De dónde surge mi interés por dicho lugar aparte de su belleza? Pues porque tiene relación con mi pueblo, Don Benito ( Extremadura) , aunque suene sorprendente. 
Joaquín Carballo ( o Carvalho por sus antecedentes portugueses  o Carvallo por su afrancesamiento posterior) nació en Don benito, en 1869, en el seno de una familia acomodada. Estudió medicina con tanto interés que recibió una beca para trabajar en el laboratorio del que luego sería premio Nobel, Charles Richet. Allí conoció a una colega estadounidense, Ann Coleman, con la que tuvo enconados enfrentamientos debido a  la guerra entre EEUU y España. Pero como del amor al odio van dos pasos, ambos terminaron casados. No contentos con unir sus destinos, abandonaron la medicina y compraron un castillo del siglo XV con intención de restaurarlo. Y de esas siembras, estas cosechas. 
El castillo fue construido  por Jean Le Breton, embajador en Italia y luego consejero y secretario de Francisco I de Valois, Rey de Francia, sobre los cimientos de una antigua fortaleza conocida como “Colombier”. En 1754  el Château fue adquirido por el Marqués de Castellane quién efectuó  en la propiedad  numerosas  transformaciones. Durante la Revolución francesa fue confiscado pero   Napoleón  Bonaparte la compró para regalársela a su hermano José.
Villandry pasó a manos de Carballo en Diciembre de  1906 e inició  la restauración de las fachadas y del patio, obras  que durarían hasta 1924. Joaquín falleció ese año tras una operación en París y fue enterrado en la propiedad a la que tanto amó.
Otra gran aportación de este dombenitense   fue la creación de "Demeure Historique" una asociación cultural que promovió la apertura de los monumentos privados al público. Se puede decir que, en parte, gracias a él, visitamos y gozamos de tan bellos parajes. ¡Cómo para no estarle agradecida! 
 
Mi reconocimiento a Daniel Cortés, de Torres Isunza,  por  su investigación anterior sobre este insigne ciudadano de nuestra villa. Su trabajo me ha servido para elaborar el presente artículo, rematado por la omnipresente wikipedia. 


 

 

jueves, 21 de febrero de 2019

Sosiego


 




Me zambullo en el fondo de tus ojos
para hallar la paz que anhelo.
Me retraes a los años infantiles,
cuando los problemas se desvanecían
al traducir mis delirios en palabras,
y escuchaba tu risa,
que censuraba mi angustia con ternura.
Me calmas.
Me devuelves a un pasado de sabanas tendidas
y plantas recién regadas,
a un patio de verano,
a susurros en la siesta,
a bromas nocturnas con las vecinas
sentadas en torno al umbral.
Me retornas a charlas en la camilla
al calor del brasero,
a confidencias de amor,
tuyas y mías;
a confesiones de adultas,
de madre e hija.
Miro tu imagen y no te has ido.
¡Calaste tan hondo que no me faltas!

                                     

                                                                 "A mi madre, siempre"

jueves, 14 de febrero de 2019

Las señales.


No podemos dejar de prestar atención a las señales. Nos pueden costar libertades importantes. No me interesa el número exacto de personas que se manifestaron el pasado 10 de febrero en Madrid contra el actual gobierno . Da igual que fueran cien o cien mil. Tenían derecho a manifestarse. Lo que me preocupa es que las personas que no comulgamos con semejante ideología nos quedemos de brazos cruzados, pensemos que son una panda de descerebrados y olvidemos lo que la Historia nos ha enseñado. De la indiferencia se nutre la ignorancia, de la abstinencia de las izquierdas se llenan las urnas de la derecha. Ya Hitler se aprovechó del populismo fácil, del miedo de la gente, del paro, de la xenofobia y la homofobia y cualquier fobia disponible. Ahora , a estas alturas de siglo, también nos quieren a las mujeres en casa, con la pata quebrada, restituyendo los puestos de trabajo que hemos “usurpado” a los varones, devolviéndonos la santa estampa de mujer esposa y madre abnegada. De verdad, miedo me da. No de que ellos ganen porque sus ideas hayan calado entre los españoles como ha ocurrido en Italia y, más asombroso aún, en países que siempre fueron ejemplo de modernidad como los escandinavos...No. De lo que tengo miedo es de que las izquierdas se despedacen entre ellas y a los de a pie nos quemen la moral y pasemos de ponernos ante las urnas. Porque los otros no faltarán. Y así se ganan elecciones. Con peleas, gallos de corral y abstención, NO.

jueves, 7 de febrero de 2019

Goyas 2019


Confieso que me divertí en los Goya. Y eso que me senté frente a la televisión con cierta precaución.El año pasado se me atragantaron. Resultaron zafios a más no poder. Pero Buenafuente tiene esa manera de decir las cosas que provoca la sonrisa, si no la carcajada, por su sarcasmo. Imitó a Groucho Marx y lo bordó, pero claro, él no tiene nada que envidiarle al cómico americano. Se nota que soy seguidora del catalán ¿no? En efecto. Cataluña produce delicatessen igual que el resto de CCAA y los cómicos se les dan especialmente bien ( no voy con segundas; esta vez no me refiero a los políticos).
Silvia Abril estuvo a la altura de su dúplice pareja y condujeron la gala con más altos que bajos. Las voces de Rosalía (maravillosa su interpretación de una de mis canciones favoritas, “Me quedo contigo”), Amaia, Rozalem, Judit Neddermann y la interpretación de James Rhodes aportaron un ingrediente que aplaudo, darnos a conocer las canciones nominadas en directo en vez de envasadas…
Valiente la plana mayor de Carmen y Lola, por tratar el asunto de la homosexualidad femenina en la etnia gitana, así como el discurso de su directora, Arantxa Echevarría. Y ¿por qué no decirlo también? La presencia de Maxim Huerta ofreciendo un toque de humor a su meteórica carrera ministerial dando paso a los cortos.
La única crítica que pongo a los Goya es que sólo un breve palmarés de películas se lleven los premios. No lo entiendo. Si la producción es tan grande, ¿por qué no se reparten entre más títulos? Hay muchas que me han gustado y se han quedado fuera de las nominaciones. El público somos bastante borreguil, vamos a lo hecho, así que veremos las que nos ofrecen las carteleras y las críticas...Quizá por eso se ve poco cine español, siendo tan bueno como el de otras nacionalidades.
Muy feliz con el triunfo de Campeones, a quien ya dediqué un artículo. No por ñoñería ni falsa sensibilidad sino porque aborda un mundo que tenemos al lado y no queremos reconocer, a no ser que nos ataña de forma directa ( como todo, por otro lado). Me gusta que se dé visibilidad a los hasta ahora “desheredados de la tierra”: enfermos, mujeres, niños. Además, trabajaron tan bien que se merecían llevarse esa alegría. Aún no he visto El reino, pese que ardo en deseos de hacerlo porque Antonio de la Torre es un actor como un piano, pero que se llevara mejor peli el tema de políticos corruptos hubiera sido como una continuación del telediario.
También reivindico que los cortos lleguen al público de las pequeñas ciudades. Algunos tienen una pinta estupenda pero sería un milagro que pudiéramos visionarlos. Y lo mismo con los documentales. Aún conservo lista de espera de los del año pasado.
Poco más. Agradecer a la Academia que sepa renovarse. Breve pero contundente la reflexión de su presidente, Mariano Barroso. Aplausos desde mi blog.
Una última reflexión: veamos cine español. Sí, hay pelis malas, pero también las exportan los americanos y nos las tragamos a saco.Las hay buenas. Y muy buenas. Quedémonos con esas.